El fracaso del fitness de salón

Empieza el 2013 y con la entrada de año llega un clásico tan tópico como las películas de Ben-Hur en Semana Santa: las resoluciones de año nuevo. Y, de entre ellas, una de las más clásicas y que más agradecen los propietarios de gimnasios es, sin duda,ponerse en forma. Las salas de cardio se llenan de personas de mediana edad con la fuerte determinación de rebajar esa barriga prominente cultivada a base de una ingesta regular de cerveza y reforzada tras las innumerables comidas familiares de las navidades.

De todos modos, esta es una página dedicada a videojuegos y no he venido a hacer una disertación sobre psicología de gimnasio, de lo que os vengo a hablar es del intento (¿fallido?) de introducir el fitness como un servicio para las consolas.

El primer intento claro que me viene a la mente a la hora de juntar deporte y videojuego llegó con el lanzamiento del EyeToy para Playstation 2. Este periférico quizás no gozó de un gran nivel de popularidad pero, en cierta manera, fue el predecesor junto con Singstar de hacer llegar el ocio digital al gran público.

Entre las varias aplicaciones que se lanzaron entonces, Sony nos quiso animar a hacer deporte en casa con EyeToy: Kinect. Este juego nos proponía distintos ejercicios diseñados por especialistas que buscaban transformar tu salón en tu propio gimnasio.

La verdad sea dicha, este juego era más o menos eficaz a la hora de crear rutinas de aerobic con minijuegos que usaban la cámara para reconocer tus movimientos y buscaban que fueras moviéndote acorde a ciertos patrones. Por otro lado, la parte de hacer trabajo muscular era bastante pobre y consistía en ir siguiendo unos ejercicios que aparecían en pantalla como quien sigue un vídeo sin que hubiese realmente interacción juego-usuario.

Wii Fit

Con la llegada de la presente generación, Nintendo decidió como política de empresa colonizar ese vasto público totalmente profano al mundo de los videojuegos y, con ello, nos llego una aplicación que, en mi humilde opinión, ha sido uno de los grandes éxitos y, a su vez, uno de los grandes fracasos de su consola: Wii Fit.

Digo que es un gran éxito por que a nivel de ventas el juego ha llegado a millones de usuarios y las arcas del gigante japonés lo han agradecido pero también considero que ha sido uno de los grandes fracasos en el sentido de que un producto diseñado para crear un hábito al jugador no ha logrado fidelizar a su audiencia, y las estadísticas marcan que la media de uso del juego está entre las cuatro y seis semanas.

De todos modos, siendo justos con Wii Fit, Nintendo logró un avance respecto a EyeToy: Kinect y es que se amplía el rango de ejercicios en los que es efectivo el producto. Más allá de las aplicaciones obvias como podría ser el aerobic, debemos reconocer que usar sensores de presión para introducir ejercicios de equilibrio e intentar  controlar los ejercicios de musculación es, cuanto menos, una solución imaginativa.

Nike Kinect Training Official E3 Trailer

Finalmente, el tercer producto en discordia del que quería hablaros es Nike+ para Kinect, un producto que ha salido recientemente pero que ha pasado totalmente desapercibido. La verdad es que esto me sorprende bastante porque durante el pasado E3 cuando estuve hablando con la gente de Microsoft me contaron que este juego estaba destinado a revolucionar este género y que era una de las grandes apuestas de la compañía. Al final parece que se ha quedado en nada.

El gran problema de este tipo de juegos es que no logran solventar los inconvenientes de ir al gimnasio. Hace unos días leía en el blog del economista Xavier Sala-i-Martin un post interesante sobre el por qué del fracaso de las dietas de enero (http://salaimartin.com/randomthoughts/item/505-volver-a-empezar.html). La idea principal que quiero resaltar de su artículo es la diferencia entre nuestros razonamientos y objetivos a corto y largo plazo.

Cuando nos planteamos ir al gimnasio a principios de año o nos compramos uno de estos juegos es porque buscamos, a largo plazo, ponernos en forma para estar más san@s o más guap@s para el verano. Lo hacemos porque sabemos que es bueno.

El gran problema viene en que nuestros razonamientos a corto plazo no suelen ser tan responsables. Es ese dilema que aparece cuando estamos tumbados en el sofá tras una jornada académica/laboral y, pese a que sabemos que es bueno para nosotros, posponemos infinitamente la decisión de ponernos a hacer actividad física porque cualquier otra cosa, aunque sea no hacer nada, nos parece mucho más gratificante.

Fitocracy Social Network

No nos engañemos, nuestros salones no son salas de fitness, y al final, hacer deporte con el sofá al lado no es lo mismo. Por no mencionar ese gran momento en que estás todo sudado pegando botes como un loco y entra alguien en el salón. ¿Ridículo? Para nada.

Tampoco es lo mismo tener a un monitor cerca y maquinas especializadas que un entrenador virtual. Ni la variedad de ejercicios es el mismo, ni la eficacia de su ejecución, ni el sentimiento de realización personal.

¿Pero no hay nada que la tecnología pueda hacer para ayudarnos a ponernos en forma?

Pues la verdad es que actualmente existe una disciplina que busca llevar elementos de videojuegos a otras disciplinas. A nivel muy básico, es lo que han hecho páginas como Foursquare poniendo logros cada vez que haces algo concreto y que, de bien seguro, habréis visto en muchos otros sitios.

Por alguna extraña razón, parece ser que este tipo de iniciativas nos cautivan mucho y en el terreno del deporte han aparecido páginas y comunidades en las que puedes ir realizando un seguimiento de tu actividad, se te reconoce el esfuerzo a través de logros y eso empuja a los usuarios a seguir con sus rutinas y no dejar el objetivo de “ponerse en forma” a la mitad.

Just Dance 4

Finalmente, otra cosa que está funcionando mucho son los juegos en los que se hace deporte pero no son propiamente de fitness y, como ejemplo, Microsoft se ha dado cuenta de esto y ha lanzado una aplicación que mide tu actividad física en su juego de baile para Kinect.

En fin, mi recomendación personal es que si de verdad queréis poneros en forma os apuntéis a un gimnasio o busquéis algún deporte que practicar por que como pinta este 2013, en casa seguro que tendréis opciones más tentadoras que un juego de fitness.

Jordi Tudela

Ingeniero Industrial, fan de los juegos de rol, nostálgico de las aventuras gráficas y apasionado de los e-sports. Colaborador en GameHunters, LaPS3 y en su blog UltimaPartida. Es redactor jefe de e-sports en Akihabara Blues.

  1. anchuela

    El que comprara Wii FIt pensando que lo iba a usar mucho o era un iluso de aquella o no era consciente de que estos experimentos tienen poco alcance en esta industria. Y dónde digo Wii Fit digo Wii Music, Eye Toy, Kinect.,.Move… o Wii !!!

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  2. Mith

    Como bien dice Bar0net, se ha sabido explotar el tema. Hay gente que pagaría por creer que adelgaza. A por ellos. Y sí, si quieres adelgazar, ponte a dieta y ve al gimnasio.

    Interesante la reflexión del final, efectivamente creo que compartir los datos de tu progreso alimenta la competitividad, lo cual puede fomentar el éxito.

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  3. _~lee~_

    Aquí hay otro de los que sabia que esto iba a ocurrir. Y efectivamente, no me he comprado ninguna de las cosas estas, y si quiero adelgazar o ponerme cachas me apuntaría a un gimnasio.

    Por otra parte, los videojuegos se tendrían que quedar en entretener, divertirte y sorprender. Se puede hacer algo mas con los videojuegos, por ejemplo aprender algo de historia si estas jugando un Age of Empires o ingles en el caso de que lo decidas jugar en ese idioma, pero cosas como esos dos ejemplos. Nada de gimnasia ni cosas asi.

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  4. Narfm

    Pero quizá la clave no sea ver estas cosas como videojuegos, sino como programas/aplicaciones.

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    • Sasy

      Es que hay que verlos así, como programas, como una ayuda para una rutina ligera de ejercicios, siempre y cuando tengas las ganas y la constancia de usarlo.

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