La llamada de la jungla

Mi nombre es Jason. Creo. Todos repiten esa palabra cuando se dirigen a mí, así que debe ser mi nombre.

No lo recuerdo.

En este instante poseo en mis manos un cuchillo, con adornos tribales. No recuerdo su nombre, si es que alguna vez lo tuvo. Mi mano izquierda agarra a la mujer que una vez amé. O creía haber amado. O sigo amando. No lo sé. Está atada, indefensa. Su pelo marrón corto es incapaz de tapar las lágrimas que afloran al mirarme. Parece extrañada. Claro, estoy a punto de degollarla. No imagino que sea el pensamiento más sencillo de asimilar cuando el gesto viene de la persona amada. Pero no sé si voy a degollarla. Pese a que ellos me lo gritan. Ellos son rakyat. Algo así como los aborígenes locales. Solo que no van desnudos ni nada de eso. Tienen tatuajes, como los que progresivamente han ido inundando mi brazo izquierdo. Y tienen ropa. Y algunos, hasta se emborrachan. Su líder se llama Citra. Es preciosa. Pelo medio rapado, ojos claros, el cuerpo curtido por las inclemencias del tiempo y atlético por la caza. Una diosa. Y dice que me quiere, que me ama, que me necesita, que soy el elegido. Y que debo degollar a la mujer que tengo delante.

Dudo.

No sé cómo he llegado aquí.

Far Cry 3 – Demon fight and nude scene

Creo recordar que vine con unos amigos, entre ellos mi hermano. Que murió después. O no, no sé. Nos secuestraron. Caímos del cielo y dejamos de sentirnos dioses. Vaas. Ese flipado. Estaba loco. Silbaba. Quería debatir conmigo sobre la locura, como si el mero acto de debatir sobre la locura con un prisionero no fuera indicativo bastante claro. Le maté. O solo le apuñalé. No lo recuerdo. La jungla me ha ido llamando, y he ido perdiendo la consciencia. Solo soy capaz de recordar un continuo ajetreo, de un lado de a otro. Recuerdo a un doctor, que en su casa, en la colina, fue acogiendo a los amigos que fui rescatando. Recuerdo a un espía norteamericano. Estaba loco. Como todos aquí, naturalmente. Y recuerdo a Sam. Era un infiltrado. Me ayudó a enfrentarme a Hoyt. Oh, claro, Hoyt era el dictador local, amo de todo y de todos. También murió, ¿no?

He cazado osos a machetazos. Me hincaban las garras en la piel, pero no sentía el dolor. Mi cuerpo está agujereado a causa de jeringuillas. He consumido…¡Dios, he consumido estupefacientes! Preparados químicos creados a partir de las plantas de la isla. Me producían extraños efectos. He cazado panteras negras, cocodrilos albinos. He cazado tiburones rojos. Nada ha podido conmigo. Nada.

He manejado tantas armas que he olvidado sus nombres. Las balas cayendo sobre el suelo. Las explosiones. Los vehículos. He olvidado qué era la sorpresa. Soy una máquina. Los aldeanos me dan igual. Los rakyat me dan igual. Mis amigos me dan igual. Me doy igual. La Isla me da igual. Nada me sorprende ya.

news_far_cry_3_island_survival_guide-13270

Tantas veces mi piel ha sido destrozada, tantas veces he sentido la mirada del tigre, agazapado entre los matorrales, tantas veces la serpiente me ha mordido inoculando en mi interior su veneno. Y sigo vivo, pero nada me sorprende.

He destruido cuarteles llenos de enemigos. Con sigilo, acuchillando. Con violencia salvaje. He colocado minas, he colocado explosivos. He ametrallado civiles. He quemado plantaciones y volado helicópteros.

¿Está mi alma esperando a que decida qué hacer a continuación? ¿Debo hacer caso a la diosa Citra y acuchillar a la mujer que alguna vez amé? ¿Qué soy para Citra, para los rakyat? ¿Soy un dios? ¿Para qué me quiere Citra? ¿Acaso puede quererme para algo más que para mantener pura la línea sucesoria? ¿Es eso? ¿Citra solo me quiere para perdurar, para que los rakyat perduren? ¿Solo quiere follarme por mi semen? ¿Me matará luego? ¿Se acabarán luego las preguntas? ¿Moriré como un guerrero, resistiéndome a la oscuridad?

citra

¿Y si debo rechazarla? ¿Y si debo huir de la Isla con mis amigos? ¿Cómo me reconoceré? ¿Cuánto me he perdido? ¿Cómo se llamaba mi novia? ¿Rikki? ¿Nikki? ¿Será capaz de amarme de nuevo? ¿Seré capaz de reconocer ese amor? ¿Quién soy? ¿Acaso no he inflamado la jungla con fuego e ira? ¿Cómo obtendré la paz? ¿Quién soy? ¿Qué debo hacer?

Vaas.

vaas

¿Sabías ya ésto? ¿Conociste a Citra? ¿Te hiciste las mismas preguntas que yo? ¿Podría haber acabado como tú? ¿Soy tú? ¿Eres mi hermano? ¿Huiré de mis amigos y de Citra, secuestraré a gente y reflexionaré con ellos sobre la locura antes de atarlos a una piedra y arrojarlos a un pozo?

 

 

 

 

¡VAAS ERES MI HERMANO! ¡NO LO ERAS! NO SÉ QUÉ DEBO HACER, NO SÉ QUÉ DEBO HACER. ELLOS ME GRITAN. LA JUNGLA ME GRITA. MIS AMIGOS ME GRITAN. LOS RAKYAT ME GRITAN. CITRA ME GRITA. GRITO. GRITO. NO SÉ QUÉ HACER. CÓMO VOY A SABERLO SI OLVIDÉ MI NOMBRE. OLVIDÉ EL SIGNIFICADO DE LOS TATUAJES, OLVIDÉ LAS CARTAS DE LOS PERDIDOS, OLVIDÉ LAS RELIQUIAS. LOS MANGLARES. LOS MANGLARES. CRECEN Y ME CONDUCEN AL CAMINO. AL CAMINO DE LA LOCURA. AL CAMINO DE LA RESPUESTA. PORQUE NO SÉ NADA. NO SÉ QUÉ RESPONDER. VEO A MI HERMANO BAILANDO COMO UNA STRIPPER. VEO A HOYT Y SUS GUARDAESPALDAS MUERTOS CON  MIS MANOS LLENAS DE SANGRE. VEO EL CUELLO DE NIKKI ABRIÉNDOSE Y DESPARRAMANDO SANGRE SOBRE MI PECHO CON UNA SORDA QUEJA. VEO A CITRA SOBRE MÍ CON SUS PEZONES CUBIERTOS DE CERA ROJA. VEO LLAMAS QUEMÁNDOME. VEO LA OSCURIDAD. FORMAS EN LA OSCURIDAD. OJOS QUE ME CONTEMPLAN. LA JUNGLA ME LLAMA PERO NO LA ESCUCHO. GUSANOS. GUSANOS BAJO EL AGUA, SOBRE LOS OCULTOS TESOROS. EL AZUL Y EL VERDE SOBRE EL AMARILLO. LOS BARCOS. LA GASOLINA. LA PAZ Y LA FURIA. EL CUCHILLO QUE PORTO ES LA RESPUESTA. DEGOLLAR O NO DEGOLLAR. NO QUIERO PENSAR. NO PIENSO. SOY UN MECANISMO DE CARNE Y HUESO. SOY UN DIOS DE LA MUERTE. NO HAY JUSTIFICACIÓN NI SOMBRAS. NO HAY GRISES. NI BLANCOS NI NEGROS. SOLO HAY UNA ACCIÓN, LIBRE DE SIGNIFICADO O CONSECUENCIA. LA ACCIÓN. ESTÁ SOBRE MÍ. SOBRE MI MANO. MI MANO DERECHA, CUBRIENDO EL CUCHILLO TRIBAL. MIRO A NIKKI. RECUERDO SU NOMBRE. PERO TAMBIÉN EL DE CITRA. Y EL DE LA JUNGLA, AUNQUE ESTÉ PROHIBIDO. NO HAY NADA SALVO LA ACCIÓN. COJO LA CABEZA DE NIKKI, LA LEVANTO, EXPONIENDO SU CUELLO. MIRO A CITRA. DUDO POR ÚLTIMA VEZ Y DECIDO.

decido

Mi nombre era Jason. Creo.

Guillermo G.M.

Fundador de Deus Ex Machina. Ha escrito en Desarrolloweb.com, Sphera Sports, Mondo Píxel, OchoQuince Magazine, Jot Down, Fuera de Series, El Butano Popular o Indieorama. Ha dado ponencias centradas en la historia del desarrollo independiente y en el indie fomenta la conciencia social.

    • anchuela

      Joder, ya tenía interés en este juego pero esto lo dispara, de verdad. La expectativa está muy alta. Y me refiero a las tetas y a todo el rollo este de la locura y tal.

      Responder
  1. Mith

    Tiene esa caza que vimos en Red Dead Redemption. Tiene esas escenas surrealistas de, por ejemplo, Max Payne.

    Lo cierto es que está bien, pero llegó a aburrirme.

    Responder

Comentar Mith

  • (will not be published)